Volver al Castell de Caramany siempre es un placer; sus jardines cuidados donde se celebra la ceremonia, el patio enfrente del castillo para el pica pica y sus espectaculares interiores que acompañan a los novios cuando se acicalan por la mañana. Es todo perfecto!
Marta y Marc se casaron uno de esos días llenos de nubes blancas y cielo azul, con el sol saliendo y entrando tímidamente. Los dos se vistieron en los aposentos privados de la primera planta, con gran burullo de gente entrando y saliendo de todos lados. Para mi genial; siempre es un placer tener mucha actividad des de primera hora.
Y poco más ^_^ os dejo con las fotos!
VIDEO: Blanc by litten
ARREGLOS FORALES: Montana El Taller
